QUERER SER MADRE Y NO PODER

DICEN QUE LA FE MUEVE MONTAÑAS, EN MI CASO FUE LA PACIENCIA.
Lo que podeis encontrar en este blog es sobre todo paciencia, persistencia, pero con algo de humor, o al menos eso espero.

lunes, 17 de enero de 2011

RESULTADO

Había llegado la hora de ir a recoger los resultados de todas las pruebas, esta vez fui acompañada de mi marido.
Realmente íbamos nerviosos, porque del resultado dependía nuestro futuro, yo como de costumbre no dejaba de hablar, de moverme y mi marido no se inmutaba, parecía que la cosa no iba con él, claro eso parecía, porque luego por dentro estaba que se comía.

Entramos en la consulta y el ginecólogo con una cara de seriedad que no os podéis hacer una idea, con todos los resultados encima de la mesa, se nos queda mirando y nos cuenta , que lo que tengo es ENDOMETRIOSIS, a mi eso me suena, creo que hace años cuando contaba con 16 acudí al ginecólogo por que tenía las reglas muy dolorosas y me acuerdo que me puso a tratamiento, claro mientras tomas las  pastillas muy bien pero en cuanto dejas de tomarlas volvemos a los dolores, vómitos y el tener que quedarte en la cama medio drogada a calmantes, pero no me explicaron nada más, ni me insinuaron nada, ¿como iba a sospechar que esto podía ser causa de infertilidad?.. El caso es que según el médico tengo una trompa obstruida debido a la endometriosis, y la otra se ha hecho más grande, haciendo las veces de las dos.
Esto no es causa de infertilidad, pero pone bastantes obstáculos. Entre que estoy al 50% y la baja movilidad de los espermatozoides, a mi parecer hay problemas. Pero para el doctor no, es cuestión de tiempo y de que me lo tome con calma, Empezar tratamiento de fertilidad implica que pueda tener un embarazo múltiple, según sus palabras "era lo más probable". Lo mejor sería seguir con nuestras vidas, olvidarnos del tema y así sin darnos cuenta llegarían los niños.

Bueno pues es lo que hicimos, en aquella época contaba con 33 años y nos dedicamos a olvidarnos del tema, a trabajar y pasarlo lo mejor que podíamos, que según el médico los niños vendrían en cuanto mi obsesión se me olvidara.

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